Hay muchas razones para plantearse un viaje de idiomas, cada uno encuentra la suya y aunque algunos padres son algo reacios a que su hijo/a viaje solo al extranjero, al regreso del menor siempre tienen la respuesta que les convence a las familias para repetir año tras año.
La primera vez, cuesta más:
Es ese momento donde sale la oportunidad de que el joven de la familia (que ya ha dejado de ser un niño/a) pueda practicar y mejorar de una manera más que considerable el idioma aprendido durante tantos años a base de estudiar.
Quizás en ese momento salen ciertas dudas, totalmente comprensibles, sobre la seguridad, alimentación etc... pero viajando de la mano de profesionales muchas de estas dudas quedan resueltas desde el primer contacto.
Al valor que tiene ya de por si practicar un idioma en un país de habla inglesa, se suman muchísimas más ventajas que harán de este viaje una experiencia realmente enriquecedora.
Se suma el contacto con otra cultura, otras costumbres y por supuesto la gran familia de amigos con las que se comparte la vivencia. Estos aspectos hacen que el alumno aprenda rápidamente a desenvolverse, aportándole una soltura de idioma y de decisión personal que antes ni siquiera sabía que la tenía.
Son muchos los padres que comentan que de regreso su hijo/a ha vuelto más "mayor”, que habla mucho mejor el idioma y que además se ha empapado de cultura y visitas a lugares que nunca antes habría imaginado visitar.
En resumen, el viaje al extranjero tiene un objetivo claro que es mejorar un idioma, pero si además de esto, se convierte en un viaje lleno de experiencias para el alumno...hace que aprendan de la mejor manera: Siendo felices.
Hay varios aspectos a tener en cuenta y decisiones importantes que tomar, pero cuando la más importante de todas ya está tomada... (El adolescente se va de viaje de idiomas) todo lo demás es cuestión de escoger y decidir con ayuda de un experto.
Acertar en la elección
Es un abanico muy grande el que se plantea ante nosotros para poder elegir, por ello siempre hay que buscar una empresa que nos lleve de la mano y que garantice una organización indiscutible, con el resultado esperado, sin que nada quede al azar.
En EDUCA , tras estudiar otras muchas agencias, hemos decidido trabajar con la mejor opción, bajo nuestro criterio, con una empresa que dispone de más de 15 años de experiencia y que tras una buena formación nos capacita para asesorar y guiar a cada uno de nuestros alumnos a su mejor destino.
Hay un sinfín de posibilidades pero no es tan difícil escoger la que más se adapta a cada menor, es cuestión de sentarse y capturar la idea de la familia para ayudarles a dar forma a su primer viaje de idiomas.
Podemos escoger entre varios destinos y varios tipos de alojamiento, desde estar alojado en un instituto o escuela mayor, hasta estar conviviendo con una familia para además compartir una vida cotidiana. Las estancias constan de 2 a 4 semanas, y apoyados por un completo catálogo se puede decidir el lugar y el tiempo de estancia dependiendo de las inquietudes de cada individuo.
El viaje incluye (en la gran mayoría) clases de inglés, salidas programadas, excusiones y visitas a monumentos y/o lugares de interés, etc...y los estudiantes dependiendo del destino, disfrutarán de conexión a internet, salidas a la playa, actividades deportivas, etc...
Se puede ir más allá optando por un trimestre, semestre o año académico en el instituto escogido, con la total garantía de convalidación de los estudios allí cursados al regreso a España.
En definitiva, nuestro objetivo es dar servicio a aquellas familias que quieran dar un paso más en la formación del idioma de su hijo/a, aportando una serie de ventajas por nuestra parte que darán ante todo tranquilidad: Asesoramiento desde el primer momento, acompañamiento durante todo el viaje, monitor en destino a disposición de los chico/as, contacto continuo con los padres, etc....
Leyendo esto seguramente te lo hayas planteado….¿te apetece
un viaje de idiomas ?
